Todos eran serviciales y atentos. La comida estaba buenísima.

Ubicación al lado de bares, también de restaurantes. Las habitaciones con duchas, un balcón y también un dormitorio.

Lo que me gustó de mi estancia en este hotel fue el hermoso paisaje y la amplia variedad de actividades. Disfruté mucho de las hermosas playas que rodeaban el hotel y de la oportunidad de practicar deportes acuáticos. Además, la comida en el restaurante era deliciosa y había una gran selección de platos para elegir.

Hubo algunos aspectos negativos que afectaron mi experiencia. Las habitaciones estaban en mal estado, con muebles viejos y goteras en el techo.

Mi experiencia aquí ha sido genial. Un lugar fantástico para viajar a Manzanillo y explorar los lugares locales. Mi cuarto era muy limpio, me ha encantado todo. El cuarto de estar y la cocina fueron súper útiles. En el personal todos eran muy atentos.

Nos ha gustado un montón este hotel.

Las habitaciones eran bonitas con un balcón. El hotel tenía de todo, incluyendo un cuarto de estar y una cocina.

En general, Gran Festivall All Inclusive Resort en Manzanillo tiene una buena ubicación cerca de la playa. La comida es deliciosa, con platillos de buen sabor. La alberca principal es excelente, con agua templada para niños. La atención del personal y los espectáculos son muy buenos.

Hotel lejos de ser ideal, aunque con un personal amable y un wi-fi gratis. Me han encantado sus habitaciones muy limpias. El cuarto de estar y la cocina fueron un toque muy agradable.

Tenía una cama muy incómoda.

Chicos animadores, buen servicio en restaurantes, baños y áreas limpias, fácil reserva.

Nada, todo fue perfecto.

La habitación era muy limpia, con un balcón y la experiencia en general ha sido muy buena. Fue agradable tener un cuarto de estar y una cocina.

El personal era poco profesional.

El personal es majísimo en el hotel.

Todos eran atentos y amables.

El hotel está ubicado en un lugar impresionante cerca de una playa hermosa y extensa. de disfrutar de la arena blanca y las aguas cristalinas, las habitaciones son amplias y cómodas. El baño es moderno y limpio, con todas las comodidades necesarias. El servicio es excelente, con un personal amable y atento que se esfuerza por asegurarse de que todos los huéspedes tengan una estancia agradable. El desayuno ofrece una variedad deliciosa que satisface todos los gustos.

El tiempo de espera para ciertas bebidas puede ser bastante largo, a veces más de 30 minutos.

Los empleados del hotel eran muy atentos y muy educados. Nuestras habitaciones eran muy limpias y bonitas con un dormitorio, duchas y un balcón, tal y como esperábamos.

Había camas muy incómodas en nuestra habitación.

Nos ha gustado mucho de verdad nuestra estancia en este hotel. El lugar estaba muy limpio y el personal era muy atento. Nos ofrecieron cambiar a una habitación que era muy limpia e incluía un cuarto de estar y una cocina.